Me podéis llamar Phantomrene y no vengo a hablar de cosas bonitas.
Desde muy temprana edad me fascinaron los monstruos, esos parásitos mentales que nos acompañan a todas partes.
Siempre tenemos alguna pesadilla encerrada en el armario o acechando bajo nuestras camas. No podemos aislarlas de nuestras vidas, solo ponerles un límite. Pero bajo ningún concepto deben ignorarse, merecen que se les dedique su tiempo y su espacio, es el único modo de conocer a tus monstruos y no fusionarte con ellos. Yo con cada maquillaje, fotografía, ilustración y escrito intento ponerles voz.
Acabo esta presentación citando a Brundlefly en la película de La Mosca (1986), de David Cronenberg:
«Soy un insecto que soñó que era humano y le encantó, pero ahora el sueño ha terminado y el insecto ha despertado».